Udaipur, Jaipur, Agra y Varanassi

Como era de esperarse, entre viajes en tren y bondi, mas el tiempo que lleva recorrer y demas, no estoy teniendo mucho tiempo para escribir. De todas formas, no quiero aburrirlos ni a ustedes ni al Tyler del futuro cuando lea esto, asi que voy a contar lo mas importante de cada cosa.

En Udaipur jugamos al futbol con los locales. Se volvian locos por la pelota, tanto asi que nos nombraron a Ramon y a mi, capitanes de los equipos. Igual, nada mas alejado del futbol. Todo era un verdadero caos, como todo aca en india, pero no por eso menos divertido. Imaginense diez indios corriendo atras de la pelota, vestidos de pies a cabeza, con jeans y camisas de colores y algunos hasta con zapatos de vestir. Gritando, pateando la pelota a pleno puntin asqueroso para cualquier lado, total, a nadie le importaba para donde fuera la pelota, lo divertido era compartir el momento.

En Jaipur conocimos a Gudu, un indio que vivia en españa y al escucharnos hablar español, se acerco y nos invito a su casa. Claro que aceptamos, y llevamos un budin de chocolate que nos salio un huevo y medio, todo para que cuando llegasemos, su madre se lo encanutara para luego enterarnos que tanto ella como su hermano (que vivian juntos en una casa de 2x2) eran diabeticos. Con las ganas que le teniamos al budin..!! Pero bueno, tomamos chai con ellos sentados donde podiamos porque la casa consistia en una cama y un par de muebles apretujados mientras nos contaba de su familia.

En Agra vimos el amanecer en el Taj Mahal, verdaderamente imponente e isotropicamente hermoso por donde se lo mire, pero mas interesante aun fue manejar un rickshaw (uno de las endemoniados mototaxis) de noche gracias a Samir, nuestro tachero amigo que conocimos viaje a Faterhpur Sikri, un complejo de templos mongoles. Todavia no entiendo como no morimos, pero no importa, lo importante es que asi fue y estamos todos felices de haber manejado por las calles de este pais tan inescrupulosamente infractor.

En Varanassi hicimos un paseo en gondola por el Ganges al atardecer donde vimos la vida en los Ghats (escaleras que dan al rio), incluso en el Burning Ghat donde creman los cuerpos antes de tirarlos al rio. Nos cruzamos con varias procesiones funerarias en el camino (te pasan con el fiambre por al lado) y comparti un chai en la oscuridad del ghat crematorio con un oscuro personaje de la ciudad.

Ayer nos alejamos un poquito de la ciudad para ir a Sarnath, un pueblito a unos 15km de Varanassi, donde por la noche asistimos a un casamiento en el cual, creanlo o no, fuimos los invitados de honor y nos trataron como reyes (ni hablar que nos ahorramos la comida), bailamos y comimos por horas. Dormimos en un templo tibetano y recien me despedi de las chicas, quienes sigueron su camino a malasia. Ahora dentro de unos minutos me voy a la estacion donde me despido de Ramon y seguire el viaje por mi cuenta.

Un abrazo grande!!